
La cara del mal
A veces tenemos prejuicios acerca de otros/as, ya sean compañeros/as, clientes, partners, antiguos colegas, etc.
Pero pensemos que en función de los intereses y de los objetivos establecidos de forma individual y grupal a veces vienen opuestos a otros de otras personas, organizaciones, equipos.
Por otro lado, están los prejuicios o los juicios emitidos por malas experiencias pasadas. Donde pensamos que un/a colaborador/a en concreto no va a participar, no va a sumar y que otro/a en cambio va a ser ese/a crack que brillará en el proyecto.
¿Cuál es la clave para ser productivo independientemente de la situación?
No pensar en los demás, con sus antecedentes e historia pasada, simplemente pensar en lo que uno/a mismo/a puede aportar y sumar al proyecto.
Analiza a tu equipo, a tus compañeros y compañeras y como pueden sumar con sus diferentes skills, a nivel individual y en su suma a nivel de equipo.
Y si alguno/a de ellos/as no sumó en un momento pasado, recuerda que no hay buenos/as y malos/as profesionales, sino personas que encajan mejor o peor en un proyecto. Una persona que no funciona en un proyecto puede perfectamente ser el líder de otro proyecto, es cuestión del encaje, del contexto.
Lo que importa es la actitud y ser positivo/a, darlo todo a diario.
Y tú, ¿cuál es tu enfoque ante un nuevo reto?